Surco con la mirada su cuerpo,
introduciéndome
en el más afín
de los deseos.
de los deseos.
Siento
el calor del cuerpo,
sus
labios en mis labios,
y
corazones ardientes
fundidos en un eterno jadeo.
Provocándonos.
Saciándonos de amor.
Apasionados del momento.
Indomables... rendidos en el deseo.